29 de julio de 2015
Alberto Tavernise, un herrero oriundo de Santa Rosa, saltó a la fama hace unas semanas atrás cuando contó dos traumáticas noches que habrían ocurrido en el campo de Moralejo: la del 9 de agosto de 2014, cuando se enfrentó con un grupo de cinco de estos "bichos" y la del 7 de noviembre, del mismo año, cuando un OVNI lo abdujo y lo tuvo retenido durante un tiempo que él estima en hora y media. Sobre ello, quiere contar su historia en un libro que ya tiene nombre: "El Apostadero, cazador vs. alien - Una vivencia real en el monte pampeano".
Pero Ignacio Moralejo, dueño del campo donde estuvo Tavernise, lo desmintió rotundamente en una nota que dio a Infohuella. “No era un ET. Le disparó a una garrafa. Esa noche del supuesto enfrentamiento con extraterrestres, le disparó varios tiros a una garrafa”, dijo Moralejo.
Garrafa
Casi en el medio de la laguna, que está seca, aún se encuentra tirada una garrafa, con varios impactos de balas. Por el tamaño de los orificios, se presume que son de armas de distintos calibre
“Es una garrafa, por eso no le salió sangre; cómo le va a salir sangre si esto es de acero”, expresó Moralejo.
Según contó Moralejo a Infohuella, fue el mismo Tavernise quien sacó una garrafa de la casa del campo y la enterró en el barro de la laguna casi seca. “No sé con qué intenciones la enterró y no sé por qué le disparó. Tampoco sé por qué puso en mi campo, alrededor de la laguna, varias maderas con calcomanías rojas refractarias, que cuando eran iluminadas de noche parecían ojos rojos. Lo único que me queda pensar es que él armaba todo esta historia para después contar la mentira que dijo en los medios”, sostuvo.
Asesinato interplanetario
Alberto brindó nuevos detalles sobre el ET que dice haber matado en el campo de Moralejo. "Siempre iba uno adelante, que le digo el explorador. Le disparé varias veces, hasta que cayó. Se tambaleaba como un borracho pero al final cayó. Fueron muchos los tiros que le tiré", dijo en su momento. Al verlo caído, el hombre bajó del apostadero y se acercó al cuerpo. "Quedó boca arriba junto a un caldén. No se le notaba sangre ni nada. Me acerqué a cuatro metros y se me vinieron tres más, desde la derecha, corriendo. 'Estos me van a destrozar', pensé. Agarré dos bombas de humo, las tiré y me fui".
Mentiras
“Son todas mentiras. Este hombre no está bien. Hace más de 50 años que vivo acá en el campo, han pasado más de mil cazadores por esa laguna, nunca vi nada extraño”, expresó Moralejo.
La tranquilidad del monte oesteño fue sacudida por la noticia y el relato del asesinato interplanetario contada por Tavernise.
Moralejo expresó a InfoHuella que cuando se enteró de lo que se estaba hablando y de las fotos de su apostadero en los medios, lo invadió una gran preocupación. “Quizá para él esto lo beneficia, pero a mí no. Paso noches sin dormir, no sé qué más puede hacer este hombre, porque para mí no está bien. Hace unas semanas vinieron unos ufólogos y no los dejé ingresar. Es más, los invité a ir juntos a la comisaría de Luan Toro, registrar los nombres y patentes de sus autos para que no aparecieran más por mi campo”, dijo.
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"No mató a un ET: era una garrafa"
Ignacio Moralejo es el propietario de un campo de 200 hectáreas que está ubicado a unos cinco kilómetros de la Ruta 10, y a unos 20 kilómetros de la localidad oesteña de Luan Toro.
A unos 400 metros de la casa que tiene en su campo, hay una laguna, que en las orillas tiene un apostadero, con chapas pintadas de verde. Lejos de validar la historia del crimen interplanetario que desde La Pampa recorrió el mundo en pocas semanas, asegura que en su campo no hay extraterrestre y que el supuesto enfrentamiento con los ET fue, en realidad, con una garrafa.
Alberto Tavernise, un herrero oriundo de Santa Rosa, saltó a la fama hace unas semanas atrás cuando contó dos traumáticas noches que habrían ocurrido en el campo de Moralejo: la del 9 de agosto de 2014, cuando se enfrentó con un grupo de cinco de estos "bichos" y la del 7 de noviembre, del mismo año, cuando un OVNI lo abdujo y lo tuvo retenido durante un tiempo que él estima en hora y media. Sobre ello, quiere contar su historia en un libro que ya tiene nombre: "El Apostadero, cazador vs. alien - Una vivencia real en el monte pampeano".
Pero Ignacio Moralejo, dueño del campo donde estuvo Tavernise, lo desmintió rotundamente en una nota que dio a Infohuella. “No era un ET. Le disparó a una garrafa. Esa noche del supuesto enfrentamiento con extraterrestres, le disparó varios tiros a una garrafa”, dijo Moralejo.
Garrafa
Casi en el medio de la laguna, que está seca, aún se encuentra tirada una garrafa, con varios impactos de balas. Por el tamaño de los orificios, se presume que son de armas de distintos calibre
“Es una garrafa, por eso no le salió sangre; cómo le va a salir sangre si esto es de acero”, expresó Moralejo.
Según contó Moralejo a Infohuella, fue el mismo Tavernise quien sacó una garrafa de la casa del campo y la enterró en el barro de la laguna casi seca. “No sé con qué intenciones la enterró y no sé por qué le disparó. Tampoco sé por qué puso en mi campo, alrededor de la laguna, varias maderas con calcomanías rojas refractarias, que cuando eran iluminadas de noche parecían ojos rojos. Lo único que me queda pensar es que él armaba todo esta historia para después contar la mentira que dijo en los medios”, sostuvo.
Asesinato interplanetario
Alberto brindó nuevos detalles sobre el ET que dice haber matado en el campo de Moralejo. "Siempre iba uno adelante, que le digo el explorador. Le disparé varias veces, hasta que cayó. Se tambaleaba como un borracho pero al final cayó. Fueron muchos los tiros que le tiré", dijo en su momento. Al verlo caído, el hombre bajó del apostadero y se acercó al cuerpo. "Quedó boca arriba junto a un caldén. No se le notaba sangre ni nada. Me acerqué a cuatro metros y se me vinieron tres más, desde la derecha, corriendo. 'Estos me van a destrozar', pensé. Agarré dos bombas de humo, las tiré y me fui".
Mentiras
“Son todas mentiras. Este hombre no está bien. Hace más de 50 años que vivo acá en el campo, han pasado más de mil cazadores por esa laguna, nunca vi nada extraño”, expresó Moralejo.
La tranquilidad del monte oesteño fue sacudida por la noticia y el relato del asesinato interplanetario contada por Tavernise.
Moralejo expresó a InfoHuella que cuando se enteró de lo que se estaba hablando y de las fotos de su apostadero en los medios, lo invadió una gran preocupación. “Quizá para él esto lo beneficia, pero a mí no. Paso noches sin dormir, no sé qué más puede hacer este hombre, porque para mí no está bien. Hace unas semanas vinieron unos ufólogos y no los dejé ingresar. Es más, los invité a ir juntos a la comisaría de Luan Toro, registrar los nombres y patentes de sus autos para que no aparecieran más por mi campo”, dijo.
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