Guillermo Federico Ibarrola, de 39 años, fue noticia en los últimos días por haber estado preso por error. Y ahora no tiene dudas: "Me podrían haber arruinado la vida", asegura.

A Guillermo lo atraparon en la terminal de Retiro, gracias al Sistema de Reconocimiento Facial, pero no era él a quien debían buscar.

Habían cargado mal los datos y en realidad el verdadero delincuente es un homónimo, acusado de un robo en Bahía Blanca ocurrido en 2016.

"Ayer me estaban llevando a un penal -Villa Floresta- sin haber hecho nada. Me podría haber pasado cualquier cosa, más cuando soy de otro lugar y jamás estuve detenido. No se cómo me hubiera manejado ahí adentro, seguramente me hubiera ido mal", contó con indignación en diálogo con el periodista Germán Sasso.

"Yo tengo mis hijas, mi nieta y mi madre, que dependen de mi trabajo y hace 19 años que estoy en el mismo lugar", agregó.

Y sobre el momento de su captura, recordó que "yo venía con mi novia y dos chicos de ella, pasando los molinetes de Retiro me detuvieron por las cámaras faciales. Empezaron a buscar mis datos y me dijeron que estaba demorado".

"Después de media hora me explicaron por qué, les dije que jamás había estado en Bahía Blanca y mucho menos en una Fiscalía. Yo viví toda mi vida en la misma dirección y jamás me llegó una citación ni nada por el estilo. Me podrían haber arruinado la vida, de hecho fueron momentos muy angustiantes", indicó.

Por último, a modo de descripción, Guillermo manifestó que "esa semana fue de terror, nada lindo pudo haber pasado. Mi mamá se levantaba a las 5 de la mañana y estaba hasta las 11 de la noche buscando ayuda. Mi abuela también".

"Cuando iba en viaje para Bahía, en un patrullero, llamaron a los oficiales que me trasladaban diciéndoles que no me llevaran al penal, que me cuidaran y que llegara bien. Les dijeron que me saquen las esposas inmediatamente porque hubo un error", señaló Guillermo. Fuente La Brujula